Novela: «Carne de sirena», de Montero Glez
Sergio Torrijos Martínez “Entonces se le antojó que, más que un fruto, aquella mujer era una flor; una de esas flores que solo se mantienen vivas si son regadas con saliva.” Pág. 47-75. Si empiezo así la reseña es un pequeño aperitivo para los que no han tenido el placer de leer a este escritor.…









